De hecho, recientemente se ha cumplido un año desde que se aprobara el Decreto 0884 de 2012 que “permite a los teletrabajadores tener las mismas condiciones y derechos frente a los trabajadores regulares”, ha explicado a Pymerang el ministro de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) de Colombia, Diego Molano Vega. Este aspecto sumado al rápido crecimiento de las TIC de los últimos años está posibilitando que esta modalidad laboral tenga cada vez más repercusión en el país.
Según el artículo 2 del texto legislativo, se puede definir el teletrabajo como una forma de organización laboral que consiste en el desempeño de actividades remuneradas utilizando como soporte las TIC sin que se requiera la presencia física del trabajador en un sitio específico del trabajo.
Mayor productividad y sostenibilidad
De esta práctica se derivan cinco ventajas fundamentales. En primer lugar, según indica Molano Vega, “genera una movilidad más sostenible”, ya que implica menores traslados al lugar del trabajo, lo cual se traduce en un impacto ambiental positivo, pues se reduce considerablemente el uso de combustible necesario para los desplazamientos.
El segundo beneficio es que permite a los empleados ser más productivos “al eliminar tiempos muertos en desplazamientos y disminuyendo las distracciones en la oficina”. Incluso, una mayor productividad está estrechamente relacionada con el aumento de la calidad de vida del trabajador.
Para la empresa, una de las ventajas principales es que les permite ahorrar costes fijos en las instalaciones como luz, agua, teléfono y otros servicios. La compañía estadounidense Cisco Systems, así, asegura que es posible reducir el 18% los gastos de electricidad en los edificios.
Del mismo modo, el teletrabajo posibilita la inclusión laboral de población que, por circunstancias como discapacidad, aislamiento geográfico o maternidad, no cuentan con mucha facilidad de desplazamiento al lugar de trabajo.
El quinto y último punto es que esta modalidad promueve el uso efectivo de las TIC en el sector productivo, de cuya implantación cada vez más depende la competitividad de las compañías.
Sin embargo, el ministro de TIC señala que son “la barrera del desconocimiento y la barrera cultural” los mayores obstáculos que frenan a las empresas colombianas para apostar por el teletrabajo.
Fuerte apuesta por el teletrabajo
Aparte del Decreto 0884 de 2012, el MinTIC ha puesto en marcha diversas iniciativas para impulsar la implementación de políticas públicas de teletrabajo en las regiones y en las principales ciudades colombianas. Una de ellas es la publicación del Libro Blanco del Teletrabajo, una guía práctica que pretende facilitar a las empresas la instauración de proyectos piloto de teletrabajo a través de una metodología que se ajuste al contexto del país. La guía, además, explica cada una de las etapas que deben seguirse para alcanzar el objetivo.
Desde el Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones informaron de que existen varios casos de éxito en Colombia en el ámbito del teletrabajo. Por ejemplo, IBM, Unilever o Edatel son empresas que “no solo han implementado esta modalidad laboral sino que han podido aumentar su productividad y efectividad en los procesos, generando grandes impactos, no solo al interior de sus empresas, sino también en la región”.
La adopción del teletrabajo en Colombia por sectores, según cifras que maneja el Ministerio, refleja una penetración del 42% en servicios, el 30% en comercio, el 24% en industria y el 3% en construcción. En esta línea, compañías del sector financiero como Bancolombia están comenzando a adoptar prácticas del teletrabajo, al igual que ciertos organismos públicos como el Ministerio de Trabajo, la Alcaldía de Bogotá o el propio MinTIC.
A destacar también es la firma del Pacto por el Teletrabajo, una alianza pública-privada para impulsar esta modalidad laboral en Colombia a la que ya se han sumado más de 35 entidades públicas y privadas del país.
Del mismo modo, el MinTIC ha puesto en marcha la Comisión Asesora del Teletrabajo, cuyo objetivo es brindar asesoría técnica y acompañamiento a entidades públicas y privadas en la implantación de esquemas de teletrabajo.
Con estas iniciativas, Colombia está sentando las bases para extender esta práctica laboral que aún suscita reticencias entre los empresarios pero que es avalada por multitud de estudios. Por ejemplo, según datos de AT&T los empleados trabajan cinco horas más en casa que en la oficina, tesis que es apoyada por compañías como British Telecom, que ha demostrado que los teletrabajadores son un 35% más productivos.