Estrategias de distribución: análisis horizontal del proceso de distribución
Lo primero que debe considerar es la estructura horizontal de su estrategia de distribución, es decir, ha de decidir en cantidad y calidad, respecto a los puntos de venta donde su producto estará disponible para el consumidor. En base a este decisión, quedaría implementar las políticas de distribución acordes a su objetivo, y que pueden ser:
Distribución extensiva: es la que trata de abarcar el mayor número posible de puntos de venta, sin filtrarlos por segmento de mercado ni hacer ninguna otra diferenciación. Es la opción que le garantiza una mayor difusión y una más amplia disponibilidad de cara al consumidor, aunque ello va en detrimento del margen comercial. Se recomienda para productos básicos o de primera necesidad (alimentación, higiene, limpieza, etc.).
Distribución intensiva: es la que busca distribuir su producto en puntos de una rama comercial equivalente. Se recomienda para productos como los de perfumería, material escolar, libros, etc.
Distribución selectiva: es la que le da la posibilidad como responsable del producto de restringir el número de puntos de distribución, ya sea en base a criterios geográficos, prácticos o relacionados con la imagen de la empresa y la filosofía y valores que desea proyectar. Recomendable para productos que buscan potenciar su marca y diferenciarse especialmente de las de la competencia, como pueden ser artículos de viaje, de deporte o pequeños electrodomésticos.
Distribución exclusiva: es la que escoge cuidadosamente a un número muy limitado de puntos de venta, logrando aumentar el prestigio de su firma y mejorar su posición de mercado. Es la opción que le proporciona un mayor control y un mayor margen. Se recomienda para productos de un rango de precios superior al resto, artículos muy especiales por su diseño o por la exclusividad de sus prestaciones, como pueden ser relojes o accesorios de alta gama.
No todos los productos pueden ser distribuidos de todas las maneras, la imagen de su marca se verá directamente influida por esta decisión, por lo que debe asegurarse que elegir el camino correcto, el que más le beneficia como empresa.
Además, deberá tener en cuenta que las condiciones de los acuerdos que firme con cada uno de los detallistas serán muy diferentes en función de la exclusividad en lo referente a exigencias y concesiones por su parte.
La distribución vertical: canales de distribución
Dependiendo del número de intermediarios por los que su producto pase hasta llegar al consumidor final tendrá las siguientes opciones:
Canal directo: el producto llega directamente al cliente. Sería el empleado por las entidades financieras. El costo es mínimo.
Canal corto: el cliente accede al producto tras el paso por éste de un número reducido de intermediarios (generalmente tan sólo uno). Es el utilizado por las firmas de automóviles.
Canal largo: es el más representativo de los mercados de consumo y su uso implica el de un número más elevado de intermediarios (al menos dos). Es el que generalmente eligen firmas de productos textiles. Es el que tiene que soportar los mayores costos.
Aunque, dependiendo del tipo de producto, puede suceder que los canales de distribución tradicionales, mencionados en líneas anteriores se hayan quedado obsoletos, como sucedería en los casos de ventas online (comercio electrónico) o ventas por catálogo.