Emprender siempre resulta una tarea extremadamente complicada sin importar la experiencia del emprendedor, el modelo de negocio o las perspectivas de mercado. Debido a esto, algunos emprendedores que han logrado crear una marca, situarse en el mercado recibiendo una gran aceptación y logrando enormes beneficios económicos crean franquicias. Una franquicia es una empresa que al demostrar su eficacia como generadora de ingresos se vuelve un modelo de negocios que se especifica en una serie de documentos que indican los pasos a seguir para lograr el mismo éxito.

Cada vez son más los consumidores que se preocupan por los temas medioambientales, por lo que cada vez es más importante que también lo hagan las empresas. En este sentido, por pequeña que sea una empresa, todas generan impacto en su entorno más o menos próximo, por lo que resulta importante que intenten fomentar un tipo de prácticas lo más sostenibles posibles y, con este fin, que intenten diseñar un proyecto de responsabilidad social corporativa que se tenga presente en todo momento, al realizar cualquier acción dentro de la empresa.

La mayor ventaja del outsourcing o externalización de servicios es que posibilita a las empresas dedicarse por completo a la actividad objeto del negocio y derivar otras tareas secundarias a una compañía especialista en las mismas. ¿Qué servicios se pueden subcontratar? Es posible hacerlo en casi todas las áreas: recursos humanos, marketing, finanzas y contabilidad o tecnologías de la información.

La apuesta por el I+D es la búsqueda de la mejora continua, es la proactividad aplicada al negocio en global, es el futuro convertido en ventaja competitiva. La apuesta por el I+D queda reducida a unas pocas empresas que se mueven hacia delante bajo las directrices de empresarios que conocen la importancia de no permanecer en el mismo lugar y saben que avanzar es decisivo para permanecer vivo, especialmente en el cambiante entorno en que la economía se mueve hoy día.

El Sistema B es un movimiento global integrado por empresas preocupadas por el desarrollo sostenible. Desde que surgiera en el año 2012, avanza con el objetivo de posibilitar que el interés privado (económico) y el interés común (social) encuentren su equilibrio. Aunque todavía de manera tímida, este modelo comienza a hacerse su hueco entre las empresas de Latinoamérica.