Si está considerando esta opción, le explicamos todos los pasos y requisitos para vender por internet en España.
Así, dado que Internet se ha convertido en una herramienta indispensable en nuestras vidas, dentro de las estrategias de ventas, construir una tienda online puede ser una magnífica idea. No obstante y aunque el escaparate será diferente al de un comercio tradicional, ambas formas de montar un negocio coinciden en algunos aspectos. Por ejemplo, antes de poner en marcha una tienda en Internet habrá, asimismo, que elaborar un plan de negocios, investigar el mercado y fijarse una meta y objetivos.
Plan de negocios y análisis de la competencia
Toda creación de empresas requiere el desarrollo de un plan de negocios, que sirve para marcar unos objetivos, identificar al público objetivo y explicar el producto o servicio a ofrecer. Igualmente, tal y como se haría en el caso de un negocio tradicional, es necesario efectuar un análisis de la competencia para así poder establecer cuál es el factor diferenciador.
Requisitos legales para vender por Internet
Previamente a poner en funcionamiento la empresa online, conviene informarse de cuáles son los requisitos legales para poder comenzar a operar en Internet. Hay que recordar que contar con un comercio electrónico equivale a realizar una actividad económica, por lo que es imprescindible darse de alta en Hacienda y en la Seguridad Social como autónomo. Lógicamente, la condición de empresario individual le supondrá una serie de obligaciones fiscales (IRPF, IVA, etc).
Además, dado que para vender por Internet hay que tratar con datos personales (a la hora, por ejemplo, de que el cliente proceda al pago o se registre) es importante cumplir con la Ley de Servicios de la Sociedad de la Información y Comercio Electrónico (LSSICE) y la Ley Orgánica de Protección de Datos de Carácter Personal (LOPD).
El cumplimiento de la LSSICE supone que la web contenga datos como la denominación social, el NIF y teléfono de la empresa; mientras que respetar la LOPD significa incluir el epígrafe 'Aviso legal' que incluya información relativa a las condiciones de contratación, que han de detallar el proceso de compra.
Sujetarse a esta normativa implica, si se almacenan datos personales de los consumidores, notificar la creación de estos ficheros a la Agencia Española de Protección de Datos.
Registro de dominios y alojamiento web
Ya que el negocio es virtual, es de obligación disponer de un dominio, es decir, el nombre que habrá que introducir en el navegador para acceder hasta la página web. Obviamente, el dominio tendrá que guardar relación con la denominación de la empresa online.
Al hilo de esto, surge el dilema de qué hosting elegir, que no es otra cosa que un espacio en Internet donde “alojar” nuestra página web. En la contratación de estos proveedores hay que sopesar factores como el precio o que no sean servidores sobresaturados.
Diseño de la página web
Otro aspecto relevante es el diseño de la página web, que es la carta de presentación del negocio. Aparte de que sea accesible y fácil de usar o que contenga fotografías de los diferentes productos, debe poseer un sistema de compra intuitivo y en el menor número de pasos.
La útil herramienta del “carrito de la compra” es fundamental, así como tener una cuenta en Paypal, el método de pago más popular para las transacciones online.
Optimización, promoción y publicidad
Y como es lógico, para empezar a vender cuanto antes, la tienda debe ser visible en Internet, lo que significa que hay que optimizarla según los parámetros SEO (Search Engine Optimization) para que sea localizada fácilmente mediante los buscadores.
Llegados a este punto, es hora de utilizar las estrategias de marketing haciendo uso de promociones para atraer a los consumidores y, por qué no, publicitar las mismas a través de las redes sociales. Una cuidada campaña de marketing online será clave para la visibilidad de la página, lo que se traducirá en un mayor número de visitas.