
Desde el pasado 1 de abril, los emprendedores mexicanos disponen de una asociación que luchará por sus intereses y por mejorar las condiciones para la creación de empresas en el país. Se trata de la Asociación de Emprendedores de México (ASEM), cuyo modelo se ha inspirado en la ASECH, establecida hace un año en Chile y que ya cuenta con más de 9.000 socios.