En este sentido, el objetivo principal de la Responsabilidad Social Empresarial es que el impacto positivo que causan estas prácticas en la sociedad se traduzca en una mayor competitividad y sostenibilidad para la Pyme. Así, ser responsable socialmente generará automáticamente más productividad, puesto que una mejora en las condiciones para los trabajadores optimizará también su eficacia.
La lealtad del cliente es otra de las ventajas que la Pyme podrá observar si es socialmente responsable, pues si satisface sus necesidades, el cliente querrá volver. Aunque para el consumidor son muy importantes la calidad y el precio, una atención personalizada y eficiente también es muy valorada.
La credibilidades otro punto a favor de una empresa socialmente responsable, pues si esta es respetuosa con las personas y el medio ambiente se ganará una reputación que le garantizará mayor sostenibilidad.
La responsabilidad social empresarial se focaliza, en esta línea, en tres vertientes: cuidado al medio ambiente, a las condiciones laborales de sus trabajadores y apoyo a las causas humanitarias. Esta última le trae numerosas ventajas:
Mejora de la reputación por colaborar con este tipo de causas benéficas
Implicación y motivación de los trabajadores
Reconocimiento de la labor de la empresa por parte de los consumidores
Publicidad gratuita por parte de las organizaciones
Desgravación por colaborar económicamente con este tipo de asociaciones
En resumen, podemos enumerar una serie de razones o ventajas para que la Pyme sea socialmente responsable:
Satisfacción del cliente y del empleado. Si su imagen es positiva, la Pyme conseguirá la lealtad del consumidor. Por su parte, un trabajador satisfecho es más productivo.
Mayor influencia de la empresa en la sociedad y en los líderes de opinión. Si la empresa es honesta y transparente se ganará el respeto de los líderes de opinión.
Diferencia positivamente la marca de la competencia.
Atracción de inversores. Un inversor siempre preferirá una empresa bien posicionada socialmente.
Reducción de costes. Acciones como el reciclaje o una menor emisión de gases pueden ayudar a reducir costes innecesarios.
Ya que el objetivo último de una Pyme es ser rentable y, por ende, la obtención de ingresos, si es socialmente responsable obtendrá, además, estos beneficios añadidos.