Los hombres y las mujeres no son iguales y tampoco lo son sus tipos de liderazg. Las diferencias no son sólo exteriores sino que también lo son en cuanto a aspectos como la manera de comunicar, la capacidad de empatizar, la forma de tomar decisiones.
A la hora de resaltar los aspectos en que difiere la dirección femenina de la masculina, hay que tener presente el recorrido que hace que unas y otros lleguen hasta esa posición en la empresa, porque en él está la clave que marca la diferencia.