Los departamentos de Recursos Humanos se encuentran en un momento de cambio constante (al igual que el resto de áreas en las organizaciones). La situación económica mundial ha obligado a prescindir de algunas funciones para subcontratarlas, además de optar por ideas alternativas y más creativas para hacer frente a las demandas de los clientes internos y externos.

El empowerment se traduce literalmente como empoderamiento y este concepto extrapolado al ámbito empresarial se refiere al hecho de conferir poder y autoridad a los subordinados, así como transmitirles la idea de que son dueños de su trabajo. Este traspaso de responsabilidades y competencia para la toma de decisiones es una estrategia de gestión que las organizaciones tienen a su disposición para conseguir trabajadores más motivados, involucrados y comprometidos con la compañía.

El concepto de empowerment se refiere a la facultad de delegar en los subordinados, de modo que estos adquieran la capacidad para tomar decisiones y ello derive en mayor motivación del empleado. Un alto grado de satisfacción en el personal, en esta línea, se traducirá en un ambiente más positivo en el trabajo y, por tanto, mejores resultados para la empresa.

El reclutamiento efectivo tiene un importante componente introspectivo. Para saber qué buscar en el candidato antes es necesario plantearse qué necesita la organización y por eso el diseño de puesto tiene que orbitar en torno a la idea de las competencias que requerirá.

Las transacciones internacionales conllevan una serie de riesgos entre los que se encuentra el riesgo de cambio. Este riesgo se origina por las variaciones en el valor de una moneda, cuando se ha determinado en términos de otra y puede presentarse tanto en la financiación de operaciones comerciales (tanto hacia el importador como hacia el exportador); como en las mismas operaciones en sí (cuando la opción viene denominada en moneda distinta a la empleada por el vendedor o el comprador en cada caso).