El trabajador ha sido generalmente la parte más débil dentro de la relación laboral, para evitar esta desigualdad de fuerzas, la legislación ha creado un sistema de representación de los trabajadores que, a través de dos canales distintos, pretende equiparar la fuerza entre estos y el empresario.

Canales de representación de los trabajadores

Actualmente existen dos, por un lado están los representantes unitarios (comités de empresa y delegados de personal), que son los órganos a través de los que los trabajadores ejercitan su derecho de participación y la defensa de los intereses que les son propios; por otro lado están los representantes sindicales (secciones sindicales y delegados sindicales), que son órganos de acción sindical dentro de la empresa.

La incidencia social de ciertos conflictos colectivos puede ser de tal magnitud que en los últimos tiempos el legislador ha puesto énfasis en desarrollar diversas formas de solucionarlos. Destacan entre ellos los métodos de solución extrajudicial, que intentan poner fin al conflicto sin necesidad de la intervención de un Juez.

La Conciliación

La conciliación no es sólo un medio extrajudicial de resolver un conflicto colectivo, es además, por imperativo legal, un requisito previo para poder interponer demanda judicial. No sé admitirá la demanda solicitando la solución judicial de la controversia, si a ella no se acompaña documento que acredite que las partes en conflicto han intentado previamente la conciliación.

Se conoce con el nombre de relaciones laborales a aquellas que se dan entre el trabajo y el capital, el primero es aportado por el trabajador, mientras que el segundo es aportado por el empresario o empleador, que puede ser tanto una persona física como una persona jurídica.

Según el Estatuto de los Trabajadores, para que exista relación laboral deben darse cuatro factores: voluntariedad; retribución; ajenidad en los frutos, en los medios y en los riesgos; dependencia.

El artículo 37.1 de la Constitución Española, reconoce el derecho de los representantes de los trabajadores y de los empresarios a la negociación colectiva, así como la fuerza vinculante de los convenios colectivos.

La negociación colectiva puede definirse como un poder normativo, atribuido por el Estado, directamente a los sujetos que integran las relaciones laborales. El resultado de la negociación colectiva es lo que se conoce como convenio colectivo.

Un contrato es un acuerdo entre dos personas que genera derechos y obligaciones recíprocas. Tratándose de un contrato mercantil, al menos una de las dos partes implicadas debe ser alguien dedicado a una actividad comercial y el objeto del contrato será, como no puede ser de otro modo, un acto de comercio.

En la legislación española hay varios tipos de Contrato Mercantil. Por elemplo: contrato de sociedad,  el contrato de seguro e incluso el contrato mercantil de transporte terrestre. Pero sin duda, el contrato mercantil más utilizado es el contrato de agencia.